Eres una grata sorpresa, llegaste cuando no tenía ganas de nada, llegaste cuando estaba cansado, cuando mi corazón había decidido levantar una barrera de tantas veces que había sido lastimado.
Llegaste como un huracán, revolviendo todas mis tormentas, despejando mi muelle y logrando traer contigo el sol brillante.
Me hiciste creer de nuevo, me hiciste darme cuenta que aún se puede querer bonito, que aún puedo dedicar mis letras a alguien y es que despertar por las mañanas y mirarte a mi lado, tan tranquilo, tan lleno de paz es una de las sensaciones más maravillosas que he sentido en la vida.
Llegaste a descontrolar por completo mi rutina, lograste en tan poco tiempo curar todas las heridas que había en mi alma.
Y es que contigo todo es diferente, me hiciste cambiar como persona, me hiciste crecer y madurar, lograste sacar con tanto esfuerzo a ese adulto que se reusaba a salir al mundo real, a ese adulto que se escondía tras el niño que un día fui.
Desde que llegaste todo cambio, por las mañanas al despertar sonrió al ver tu mensaje de buenos días y es que lo real es que nunca un mensaje me había causado tantas emociones, nunca un mensaje me había hecho tan feliz.
Sí, sé que en ocasiones discutimos y tenemos desacuerdos, pero lo que me encanta de mí, de ti, de nosotros, es que siempre sabemos resolverlos, que siempre sabemos nadar contra corriente y salir bien librados de ella.
Me enseñaste a amar, a amarme, a colaborar y a compartir con otra persona, porque el mayor error que podemos tener como seres independientes es buscar a alguien que nos haga felices, felices debemos de ser por nosotros mismos, para así poder compartir con la otra persona toda esa felicidad que tenemos dentro.
Hoy te escribo para agradecerte todo lo que has hecho por mí y es que aunque quizá no te des cuenta o yo no lo diga muy a menudo eres ese alguien que llegó a sanar mi corazón y a hacerme una mejor persona.
Gracias por aceptar tomarme de la mano y recorrer juntos este camino llamado vida, gracias por escoger mis labios para besarlos, gracias por elegirme entre tantas personas para compartir tu felicidad conmigo.
Desde que llegaste, soy más feliz.
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